De pequeños lo hacíamos todos, pero muchos no crecen nunca y siguen así de por vida produciendo seres rechazados por… nada. Dado que nos atenemos a la “envoltura” de las personas, ¿os dais cuenta cuántas personas maravillosas podemos estar despreciando también por su físico?
El ser humano es exigente por naturaleza –la selección natural- y yo me pregunto si lo que estamos rechazando no es precisamente lo mejor, ese ser distinto y no adocenado como la mayoría. A cambio, eso sí tratamos con personas políticamente correctas, tíos y tías buenas y eso nos basta, ¡qué pobreza de espíritu la nuestra!
Yo me precio de ser un “raro”, no sigo las pautas normalmente aceptadas porque prefiero investigar por mí mismo los vericuetos de la vida y entonces hago comparaciones con lo que hay. Está claro que nadie me puede decir si lo mío es lo correcto o lo de los demás ¿pero sabéis?, es lo mío. Odio la dictadura de las modas aunque yo ahora mismo esté entrando en la más extendida o sea internet. Pero poco más voy a conceder a ésta exigencia de nuestro tiempo.
Os propongo un ejercicio de humildad –yo lo he hecho varias veces- contactad por una vez con un “raro”, con un-una feo/a y os vais a llevar una magnífica sorpresa. Temas de conversación distintas, otros puntos de vista que no habías oído antes y magníficas personas dentro de esos seres menos afortunados físicamente.
Pero ¡ojo!, te advierto el riesgo es que acabes enamorándote de uno ellos y pases a engrosar la lista de los indeseables.
SI TE GUSTÓ TAMBIEN PUEDES VER EN ESTE BLOG: "SIN EMBARGO SE MUEVE, EPPUR SI MUOVE. PINCHA AQUÍ: http://librosrafaeljimenez.blogspot.com.es/2012/09/epore-si-muove.html
Rafael Jiménez
Hola Rafael! Sin duda me hiciste pensar con ese ultimo parrafo. aunque personalmente yo siempre tengo una primera impresion de la gente y luego se tergiversa, ya sea para verle feo o guapo dependiendo de su corazon y su forma de ser.
ResponderEliminarUn beso May R Ayamonte
Gracias May por tu comentario.
ResponderEliminarEl que malinterpretemos a las personas es el pan de cada día, dado que una cosa es lo que somos -la realidad- y otra lo que queremos ser -lo que aparentamos-. Acertar pues es una lotería e intentar descifrarlo, un arte. Hay algo que se llama fisiognomía, que nos ayuda a interpretar las actitudes humanas. Si estás tan interesada... Animo y a estudiar. Un beso para ti.